Nos pasamos la vida rodeados de tentaciones dirigidas específicamente a nuestros impulsos primarios y cada vez más personalizadas. Desde la facilidad de las compras por internet, la pornografía o el juego, hasta las cadenas de comida rápida que
se alinean en nuestras calles y centros comerciales o a un solo clic en una app, invitándonos a excedernos en todas las cosas
equivocadas. Mantenernos alejados de lo que sabemos que no debemos hacer puede parecer una lucha constante y agotadora.
La ciencia del pecado reúne los últimos descubrimientos en neurociencia para arrojar luz sobre un tema tan universal y fascina ...